Hanns-Dietrich Schmidt ha explicado cómo el problema del proyecto a la hora de presentarlo al sector público era que «durante una época la mayor dificultad de Ruhr era que la población quería marcharse, lo que hacía muy difícil convencer a los políticos de la necesidad de invertir en construir o renovar infraestructuras». En este sentido, Schmidt ha destacado la importancia de la comunicación, tanto a la hora de informar al sector público como al privado, así como en la búsqueda de implicación de la población. Este especialista ha comentado que muchos elementos del proyecto han sido financiados mediante el sector privado y que, para ello, había diferentes modelos, como la agrupación de varios patrocinadores. En referencia a este punto, Schmidt ha señalado de nuevo la importancia de la prensa que, junto a instituciones y grandes compañías ha jugado un papel clave en Ruhr 2010.