Martha Thorne ha reflexionado en su conferencia inaugural sobre el Parque del Milenio, creado en 2004, en Chicago (Estados Unidos). Era un descampado en el que aparcaban coches y donde se observaban vías de tren. 

Thorne ha explicado la evolución del proyecto, para cuya financiación más de cien particulares donaron 150 millones de dólares, y mostró al público imágenes de algunas de las infraestructuras y elementos más importantes del Parque, como el anfiteatro, Jay Pritzker Pavillion, diseñado por Frank Gehry, que cuenta con capacidad para cuatro mil personas en sillas y siete mil en césped.
Según Martha Thorne, este proyecto «fue un esfuerzo entre los poderes públicos y los agentes privados». «El Parque goza de éxito en muchas capas de la sociedad y se ha convertido en una parte de la ciudad muy deseada para vivir», añade.
Esta especialista ha comentado que el Parque cuenta con programación y posibilidades constantes de realizar múltiples actividades, «si no fuera así, sólo sería una colección de obras de arte de personalidades que querían dejar su huella en la ciudad».
Según Martha Thorne, la importancia de este proyecto radica en que fue realista, pues en ningún momento se pretendió que solucionara los problemas de la ciudad. Otro de los puntos que ha destacado la conferenciante es el hecho de que los patrocinadores privados tienen una perspectiva del tiempo distinta, que permite alargar los plazos de construcción,  puesto que lo que desean es que su obra quede para la posteridad, mientras que «los políticos quieren los resultados a corto plazo y muchas veces para ganar las elecciones».