El último equipo en intervenir ha sido el formado por Héctor Ruiz, Antonio Campos e Iker López, estudiantes de la Universidad Europea de Madrid, quienes han trabajado sobre la gasolinera ubicada en la entrada de La Orotava, que es, además, una vía de acceso al Parque Nacional de El Teide. Para los alumnos, este acceso principal es «hostil», con gran cantidad de tráfico, por lo que abogan por aunar lo natural con lo artificial. Para ello, han propuesto la utilización del pino dorado, capaz de absorber el CO2 de 5 coches funcionando durante 24 horas. Los estudiantes, en su proyecto, han planificado la creación de una calle semi peatonal y de una gran rotonda que permita desarrollar zonas verdes. Además, se colocaría una estructura artificial que imitase una hiedra para ordenar el espacio urbano, entre otras funciones, y en la que se permitiría la colonización vegetal de una hiedra invasora y otra autóctona (Ipomea SP y Pinus Grevillea). Esta estructura avanzaría también por la cubierta de la gasolinera y continuaría a la zona posterior a la iglesia del Calvario para crear zonas urbanas de descanso.